"Quien quiera pelear, primero debe pensar; quien quiera ganar, debe saber escuchar" proverbios 24:6 (1)
Cada ser humano normal nace con la capacidad de escuchar y en el transcurso de los años va desarrollándola hasta convertirla en una habilidad, de la cual poco a poco deja de ser consciente, olvidando que la importancia de saber escuchar transciende el objetivo de comunicarnos solamente hasta convertirse en la causa del éxito o desgracia de una persona. El escuchar correctamente ha superado la prueba del tiempo, convirtiéndose en algo más valioso que el oro, y en el acceso rápido a la realidad de nuestro entorno.
El hecho de que en la actualidad existan trabajos académicos profundos sobre esta habilidad, no implica que en épocas pasadas no se hubiera comprendido y resaltado su importancia. Desde la antigüedad se ha considerado que saber escuchar es más importante que saber hablar. Sabios como el rey de Israel, Salomón dedicaron suficientes líneas en sus escritos sobre este tema, como para notar su valor.
Además el escuchar correctamente se puede considerar como un acto de sabiduría, apreciable a un en el que carece de esta. Las características principales de un necio son dos: en primer lugar es la aversión al consejo, y por último, el deleite con las acciones propias y erradas. Por lo tanto que una persona con las anteriores características se detenga a escuchar, puede cambiar su calificación.
También el prestar atención a las personas indicadas nos permite visualizar la realidad sin tener que ensañarla. La mayoría de personas prefieren ignorar o desestimar los consejos provenientes de quienes tienen experiencia, por el deseo aventurero de internarse en la jungla de la vida.
Finalmente el saber escuchar demuestra la existencia de algún grado de humildad. Lo anterior sucede porque nadie puede escuchar sin tener que olvidarse de sí mismo por algún momento. El saber escuchar ha sido una constante a través del tiempo, que debe ser indiscutiblemente incluida en la fórmula del éxito. Por lo tanto los resultados en la vida personal se definen en los pequeños detalles como saber escuchar, y preferiblemente a tiempo.
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